La posibilidad de llegar tarde a una vivienda vacacional en Italia y abrir las cajas de llaves para entrar tiene los días contados, después de que el país haya prohibido esta práctica, denominada autocheck-in, bajo una nueva ley que, según dice, es necesaria para combatir el “terrorismo potencial”. Es una medida celebrada por quienes temen que el popular destino esté en peligro de ser desbordado por turistas, informa CNNespañol.

Así, las fuerzas del orden se desplegarán para garantizar la retirada de los buzones de llaves y los teclados de las propiedades con autocheck-in. Ya Florencia había prohibido estas cajas para llaves en su casco histórico, como medida estética y también para obligar a los dueños de los pisos turísticos a recibir a los visitantes en el propio inmueble, dificultando así la acumulación de viviendas vacacionales bajo un solo propietario.

Esta prohibición representa un endurecimiento de la ley italiana. Según esta, los datos de los inquilinos deben estar registrados en las comisarías locales, pero en los últimos años los administradores de propiedades han estado enviando fotocopias o fotos de teléfonos móviles a través de un sistema telemático. Ahora serán obligatorio que se registre a los huéspedes en persona, para luego trasladar los datos a las autoridades también de forma presencial.

Esto ocurre mientras Roma se prepara para una avalancha de turistas para el Año Santo Jubilar del Vaticano en 2025 e Italia alberga los Juegos Olímpicos de Invierno en Cortina en 2026, eventos durante los cuales los Airbnb y otros alquileres a corto plazo ya han sido reservados.