El paso del huracán Dorian ha sido destructivo para Bahamas, donde el número de víctimas mortales provisional ya se ha situado en los 30 y la situación ha sido definida por su primer ministro, Hubert Minnis, como “la mayor crisis nacional en la historia del país”. 60.000 personas necesitan ayuda inmediata y la mitad de las casas de Grand Bahama y las Islas Ábaco han quedado destruidas.

El único aeropuerto de Grand Bahama ha quedado fuera de servicio por lo que hacer llegar provisiones básicas a los afectados es complicada. Ante esta tesitura, según informa Travel Mole, las compañías de cruceros que suelen operar de forma habitual en la región se han volcado.

Carnival Cruise Line ha donado dos millones de dólares a la Micky and Madeleine Arison Family Foundation. Asimismo, Royal Caribbean también ha anunciado que apoyará con 1 millón, además, está haciendo envíos diarios de comida y otros suministros preparados por sus cocineros, camareros y demás miembros de las tripulaciones.

Por su parte, MSC Cruises ha enviado una delegación de su compañía y miembros de su fundación para identificar las necesidades más urgentes del país y aportar la ayuda más conveniente.

Bahamas Paradise Cruise Line ha cancelado la travesía de su Grand Celebration y dedicará el barco para llevar comida, agua, otros suministros y voluntarios desde Palm Beach (Florida, EE.UU.) a Freeport (en Grand Bahama). Asimismo, también evacuará a residentes de Bahamas afectados por el huracán evacuándolos al Sur de Florida.

El chef español José Andrés también ha estado presente mediante la organización no gubernamental World Central Kitchen. La ONG tiene su centro de operaciones en el resort Atlantis Bahamas (Nassau), donde están preparando comida para todas las personas afectadas.

Te recomendamos