Las protestas de los chalecos amarillos han tenido un fuerte impacto en la llegada de turistas a Francia. Así lo refrendan los hoteleros galos que aseguran que se ha reducido el número de reservas hoteleras en Navidad y Año Nuevo.
Según informa Tourism Review, los turistas extranjeros, con una media mayor de gasto, han optado por no viajar a Francia después de que se hayan difundido imágenes de manifestaciones violentas vinculadas al colectivo conocido como “chalecos amarillos” en referencia a las prendas reflectantes que llevan.
Este movimiento se desató en octubre de 2018 en oposición al impuesto sobre el carbono (TICPE) impulsado por el gobierno de Emmanuel Macron que provocó un aumento del 16% en los precios del gasóleo. Desde entonces, se han sucedido numerosos enfrentamientos violentos entre los manifestantes y las fuerzas del orden, saldándose con miles de detenidos y centenares de heridos.
Jean-Virgile Crance, presidente de la Asociación Nacional de Cadenas Hoteleras, ha expresado que durante el mes de diciembre se produjeron entre un 20 y un 25% menos de reservas. “En la noche de Año Nuevo “tuvimos un 30% de cancelaciones”, añade y explica que la imagen de “estado de guerra” transmitida por los medios al extranjero ha “dañado la imagen turística francesa”.
En este mismo sentido se expresa Christophe Laure, presidente de la división Prestige de la organización hotelera Umih, que asegura que en los hoteles de gama alta se redujo el número de huéspedes entre un 15 y un 20%. Apunta que en algunos establecimientos de lujo especialmente populares entre los extranjeros, el ratio de ocupación no superó el 45%.
