La idea de empezar a cobrar por acceder a determinados espacios naturales está calando cada vez más en Canarias. La primera en sacar a la palestra esta cuestión públicamente fue la consejera de Turismo y Empleo, Jessica de León, durante una sesión del Parlamento de Canarias en septiembre de 2023. Ahora, la presidenta del Cabildo de Tenerife, Rosa Dávila, ha anunciado recientemente el lanzamiento de un proyecto piloto para empezar a cobrar por el acceso al popularmente conocido como ‘Machu Picchu de Canarias’.
Tal y como recoge el diario La Provincia, Dávila ha informado de que esta primera prueba será puesta en marcha este mismo verano en el conocido barranco de Masca, en el municipio tinerfeño de Buenavista del Norte, donde se ubica el caserío homónimo. Esta es una localidad de singular y agreste naturaleza ubicada sobre la cresta de una montaña, en pleno macizo de Teno. Según las palabras de la presidenta insular, el convenio de colaboración suscrito con el Ayuntamiento de Buenavista y Puertos de Tenerife permitirá la mejora de los servicios y un incremento en la seguridad de la zona, gracias a los ingresos que se generen con la tarifa de acceso, cuyo importe aún no ha sido desvelado.
El proyecto piloto establecerá un límite diario de 275 personas que podrán visitar el barranco de Masca, con una capacidad estimada de 100.000 visitantes al año. Los turistas tendrán la opción de acceder de manera libre o a través de empresas de turismo activo. Además, se implementará una línea de autobuses para regular la movilidad y acceso al paraje, contribuyendo a una gestión más eficiente del flujo de visitantes.
La presidenta del Cabildo destacó que este nuevo modelo de visita ayudará a aliviar los trayectos de ida y vuelta dentro del barranco, disminuyendo la cantidad de accidentes y rescates. Asimismo, confía en que la limitación del número de visitantes contribuirá a reducir la presión medioambiental en la zona, preservando su biodiversidad y belleza natural.