El Ayuntamiento de Madrid se encuentra en pleno proceso para intentar poner orden al creciente turismo que recibe la ciudad —10,5 millones de visitantes en 2023, 5,7 de los cuales fueron internacionales—. Tras anunciar una moratoria sobre las licencias para viviendas turísticas e incrementar la labor sancionadora sobre la oferta alojativa ilegal, el consistorio ha decidido poner freno a los tuk tuk, vehículos que se han popularizado para recorrer las zonas más turísticas de la urbe.
Según recoge El Español, el alcalde, José Luis Martínez-Almeida, ha admitido que van a tomar medidas para regular este tipo de vehículo más típico de Asia que, poco a poco, ha tomado las calles de la capital española. “La semana pasada le pedí a la concejala de Turismo, Almudena Maíllo, que determinara cuál es la situación y el marco normativo concreto bajo el que se amparan los tuk tuk para poder tomar decisiones al respecto”, ha explicado el primer edil.
Si bien reconoce que forman parte de la oferta turística, ve de forma negativa que “están utilizando estacionamientos en calle y no son una forma de transporte”. Y es que muchos de los conductores de estos carritos tienden a aparcar en cualquier sitio para acercar a los turistas lo máximo posible a los monumentos.
Este aspecto negativo se suma a las denuncias de los taxistas, por considerarlos competencia desleal, y a las de los vecinos, que critican el número de infracciones cometidas por zonas prohibidas de la ciudad.