El Ayuntamiento de Palma (Mallorca) ha anunciado una importante modificación en las concesiones de los servicios de playa. Para evitar la creciente erosión costera y respondiendo a las quejas vecinales, ha decidido reducir el número de hamacas y sombrillas permitidas en los arenales del municipio.
Según reseña Crónica Balear, desde el consistorio están trabajando en unos nuevos pliegos que limitarán el espacio destinado a la colocación de tumbonas y parasoles que se cede a las empresas concesionarias. La teniente de alcalde y portavoz, Mercedes Celeste, ha explicado que la sensación de "sobreocupación" en las playas se debe a que las concesiones actuales, caducadas desde hace años, no se adaptan a la realidad actual de la costa, y es que la pérdida de arena en los últimos años ha reducido significativamente el espacio disponible y ha generado tensiones entre los usuarios.
"El Ayuntamiento está trabajando a contrarreloj para encontrar un equilibrio entre las necesidades de los concesionarios y el derecho de todos los ciudadanos a disfrutar de las playas", ha asegurado Celeste. Además de reducir el espacio para hamacas y sombrillas, los nuevos pliegos también priorizarán la accesibilidad, un aspecto que, según la portavoz, no se ha cumplido en los últimos años.