El Caribe mexicano está afrontando la llegada masiva de sargazo a sus playas durante esta temporada. Así lo ha confirmado la Secretaría de Marina de México, basándose en los datos de monitorización del Instituto de Oceanografía del Golfo y Mar Caribe. De acuerdo con la Red de Monitoreo del Sargazo de Quintana Roo (estado en el que se encuentran destinos como Cancún o Riviera Maya), la manera de afrontar este problema “ha fracasado” y, por ello, proponen una nueva estrategia.
El director de la organización, Esteban Jesús Amaro Mauricio, ha sugerido un nuevo proyecto denominado 60/60: el uso de barreras de unos 60 kilómetros de longitud que, en lugar de contener el sargazo, lo desvíen en otra dirección, de tal forma que no alcance las playas. Para ello, habría que realizar una inversión de 1,6 millones de dólares.
“Todo el sargazo que llega a las costas pasa por el canal de Cozumel; la idea es colocar una barrera en la punta sur de la isla y proyectarla a Boca Paila, en Tulum. Son 60 kilómetros de largo y se abre 60 grados, de ahí que el proyecto lo llamemos 60/60. Con eso protegeríamos siete municipios”, ha detallado Amaro al diario Cancún Mío.
El hidrobiólogo ha señalado que la estrategia utilizada durante los dos últimos años “es insuficiente”. Las barreras actuales y los barcos sargaceros solo cubren el 1% de la costa. Por este motivo, Amaro ha elaborado una nueva propuesta, que se centra en despejar el canal de Cozumel.
Los estudios del Instituto de Oceanografía del Golfo y Mar Caribe reflejan la presencia en el área del Caribe de más de 48.500 toneladas de alga, con montículos de más de 90 centímetros, que llegarán a las costas en la presente temporada.