Tras imponerse una cuota de entrada a los turistas que visitan el Panteón de Agripa, ahora otro de los iconos de la ciudad de Roma (Italia) podría pasar a ser de pago. 

Según informa Il Messagero, se está valorando la propuesta de limitar la entrada a la Fontana de Trevi y cobrar una tarifa por poder acceder a una de las fuentes más famosas del mundo.

Roberto Gualtieri, alcalde de Roma, ha admitido que poner límite al número de personas que accede a la Fontana es "una hipótesis muy concreta sobre la que están pensando". Subraya que se trata de encontrar la "mejor solución técnica para gestionar el flujo de turistas"

Gualtieri advierte que las grandes aglomeraciones provocan disturbios, deterioran la experiencia turística y que, incluso, podrían llegar a degradar el propio monumento en sí. "Decidimos estudiar e investigar la propuesta porque la Fontana de Trevi se está volviendo muy difícil de gestionar, según nos comentan los agentes de la policía local", ha recalcado.

La propuesta surgió originalmente del concejal Alessandro Onorato, quien cree que la mejor forma de implementarlo es invitar a los turistas a hacer reservas online con franjas horarias y turnos de media hora. Sería gratuito para los residentes de Roma, mientras que los visitantes realizarían una contribución de entre uno y dos euros.