Según informa el diario especializado Aviación al Día, Qatar Airways ha accedido voluntariamente a publicar sus estados financieros, petición que le hiciera el Departamento de Estado de EE.UU.

Las aerolíneas Delta, United y American Airlines han acusado al operador del Golfo de recibir subsidios del gobierno catarí, lo cual supondría una competencia injusta con los operadores del mercado.

Las propias líneas aéreas estadounidenses argumentaron, en 2015, que además de Qatar, Emirates y Etihad Airlines habrían recibido subsidios gubernamentales por más de 50.000 millones de dólares (unos 40.000 millones de euros) en la década pasada.

Sobre la decisión de Qatar de hacer pública su contabilidad, Peter Carter, director jurídico de Delta, ha declarado: “Este será un hito histórico para la industria aeronáutica estadounidense que protegerá a nuestros trabajadores y garantizará que nuestros competidores extranjeros cumplan con las normas”.

Las compañías aéreas norteamericanas afirman que la intervención estatal en las aerolíneas del Golfo Pérsico, están afectando la creación de empleos y la industria local. Etihad, Qatar y Emirates operan alrededor de 200 vuelos por semana en 12 ciudades de Estados Unidos.

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