La recuperación de Egipto ha vuelto a colocar al país como uno de los destinos turísticos más codiciados. Sin embargo, la justicia egipcia ha dictado una sentencia que pone en preaviso a los foráneos que se adentren en sus fronteras, ya que ha condenado a una turista libanesa a ocho años de prisión, por criticar al país en un vídeo que subió a Facebook.
Según ha informado El Mundo, la condenada de 24 años, Mona al Mazbuh, criticó durante los diez minutos que dura su vídeo a Egipto, al que tildó de “un país de hijos de puta” y se refirió a su población masculina como “mendigos y estafadores” y a la femenina como “prostitutas”. También, relató el acoso verbal al que fue sometida por parte de un taxista y dos hombres más en el barrio de Zamalek (El Cairo).
Incluso, deseó que Dios enviara al país a “alguien más represivo que Al Sisi”, haciendo referencia al actual presidente Abdelfatah al Sisi. Finalmente, el vídeo se hizo viral y Mazbuh tuvo que eliminarlo y publicar otro en el que se disculpó “solo ante los egipcios respetables”, así como aseguró: “Amo a los egipcios y a este país”.
Pero las disculpas no fueron suficientes y la joven fue arrestada a principios de junio. Un abogado local la había demandado por “difamar e insultar al pueblo egipcio” de acuerdo con los artículos 302 y 308 del código penal. Mientras, un tribunal de delitos menores de El Cairo la condenó el pasado sábado a ocho años de cárcel y a pagar una multa de 10.700 libras (509 euros) por "difundir deliberadamente falsos rumores que persiguen socavar a la sociedad egipcia y atacar a las religiones". La sentencia se puede recurrir y el veredicto final se emitirá el próximo 29 de julio.
Diferentes politólogos y analistas se pronunciaron sobre el acontecimiento en la red social Twitter, ya que la sentencia puede perjudicar la recuperación turística que experimenta el país. “Es una medida que probablemente animará el turismo a Egipto, un país donde alrededor del 30 por ciento de su población depende de este sector", señalaba un analista, mientras que un politólogo apuntó: “Es obviamente el tipo de cosas que haces para atraer turistas e inversiones".