Una ola de incendios está asolando Turquía. El foco más potente se ubica en Manavgat, a 60 kilómetros de Antalya, uno de los principales núcleos turísticos del Mediterráneo que, por el momento, no se ha visto afectado. Peor suerte están corriendo las zonas vacacionales del Egeo, como Bodrum y Marmaris.

Según informa Turizm Guncel, los hoteles y las casas del distrito de İçmeler (Bodrum) han tenido que ser evacuados ante el avance de las llamas. El diario explica que los turistas nacionales y extranjeros “presa del pánico” fueron evacuados vía marítima en lanchas, barcos y yates.

Asimismo, se ha hecho un llamamiento a los ciudadanos para que no hagan uso de sus coches con tal de evitar colapsos en las carreteras y facilitar el trabajo de los equipos de emergencia.
 

En Marmaris también se ha evacuado Turunç, una urbanización turística situada 8 kilómetros al sur de la ciudad.

La prensa local recoge que el primer ministro Recep Tayyip Erdogan ha declarado el estado de desastre, y es que ya se han producido ocho víctimas mortales y numerosas pérdidas naturales y materiales.

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