Pese a que Turquía solo ha informado de un único caso de coronavirus, lo cierto es que ya está notando un aumento en las cancelaciones hoteleras por el miedo a viajar desatado en sus principales mercados emisores. Por ello, las autoridades otomanas se están viendo forzadas a tomar decisiones para mitigar el impacto de esta pandemia mundial en su economía.
En una entrevista con Hüseyin Baraner, fundador de Tourexpi, el ministro de Turismo de Turquía, Nuri Ersoy, ha aseverado que la próxima semana anunciarán subvenciones para el sector turístico. Asimismo, estudiarán si cancelar hasta finales de abril todos los eventos culturales organizados por el Ministerio y las entidades dependientes de él.
En la entrevista, Ersoy explicó que desde su cartera han pedido a los hoteleros que han cerrado durante la temporada de invierno, que en lugar de empezar su actividad en marzo, como es habitual, arranquen a finales de abril. Aclara que también han pedido a las cadenas que poseen varios hoteles en una región que no abran todos los establecimientos, sino uno o dos para satisfacer la demanda.
“En la situación actual, no es muy importante lograr buenas cifras de reservas y ventas, pero desde el punto de vista de nuestro país es mucho más importante lograrlo a partir del momento en que disminuya el riesgo por coronavirus”, afirmó. A su vez, añadió que para ellos es muy importante “crear confianza en la capacidad de Turquía” para capear incluso el peor escenario posible.
Con todo ello, mantiene que están listos para “recibir a todos los turistas en Semana Santa” y ofrecer “el mejor servicio como siempre”. “Al hacer esto, también queremos mostrar a los mercados internacionales que podremos comenzar la temporada de verano desde una posición muy sólida”, concluye.
En lo que respecta a la posición del país turco con respecto a los permisos para la escala de cruceros, explica que no se fijarán tanto en el barco o compañía operadora, sino en los países de los que provienen los pasajeros. También afirmó que “algunas compañías de cruceros no estaban preparadas para casos tan graves de pasajeros infectados”, pero que está confiado en que todas siguen los protocolos de salud internacionales.