La reciente muerte del Papa Francisco ha provocado un aumento en el interés turístico por una Roma (Italia), que ya de por sí esperaba un aluvión de visitantes con motivo del año jubilar —que se espera atraiga a 32 millones de visitantes a Roma hasta 2026—. Ante estas circunstancias, los touroperadores especializados en turismo religioso están teniendo que adaptar sus programas a marchas forzadas.

Según informa Travelweekly, operadores como Unitours y Perillo Tours destacan que se ha producido un importante incremento de 'última hora' para viajar a Roma, especialmente desde algunas de las ciudades más grandes de Estados Unidos y Reino Unido. Conseguir hospedaje en la ciudad en estos días es aún más difícil, advierten."Muchos viajeros aprecian estar en Roma en un momento histórico", añade Fabrizio Bertoncin, de EF Go Ahead Tours. 

Eso sí, advierten que los viajeros se deben armar de paciencia, pues se prevén aglomeraciones y cierres en lugares tan visitados como la Capilla Sixtina, la Basílica de San Pedro y los Museos Vaticanos. Si bien se muestran confiados en que las autoridades encargadas de la gestión minimizarán el impacto en los turistas y peregrinos.

"Para los clientes que están decididos a ir, les establezco expectativas claras sobre la afluencia de público y la disponibilidad, a la vez que busco alternativas creativas para garantizar que su estancia en Roma siga siendo especial a pesar de los desafíos logísticos”, ha explicado al citado medio la asesora de viajes de Fora, Karyn Pavich.