Economía y Política

Barcelona: 30.000 € por alquilar una habitación

El Ayuntamiento de Barcelona sigue con su cruzada contra las viviendas turísticas. Ahora, los vecinos que ofrecen una habitación de sus domicilios a los turistas también están en peligro enfrentándose a graves sanciones.

El último caso conocido es el de una vecina de Barcelona que tendrá que afrontar una multa de entre 30.000 a 600.000 euros por alquilar una habitación del piso en el que reside a un turista el verano pasado. La joven asegura que: "hace varios años me afinqué en Barcelona ciudad. Pude comprar un piso con mis ahorros. Este verano, decidí alquilar una habitación a un turista en el piso donde resido. Es mi vivienda habitual, estoy empadronada allí. No es un piso turístico".

La acusada recibió una notificación municipal que le indicaba que había cometido una infracción grave de la Ley de Turismo de Cataluña. Había anunciado su piso en AirBnb como si se alquilara completo, por lo que los técnicos municipales la catalogaron como una de las 6.000 viviendas vacacionales ilegales que hay en la Ciudad Condal.  Además, al añadir en su anuncio varias fotos del domicilio pudieron rastrear su localización con la ayuda de Google Maps. 

La propietaria ha declarado que: "Cuando recibí la carta casi me da un ataque al corazón. El turista que alojé no había molestado a nadie, y sólo fue una vez. Ahora he iniciado alegaciones y, claro, acudiré a la vía judicial si es preciso". 

Según el abogado Marc Pertíñez, de Pertínez Romagosa Advocats, este caso es “minoritario, pero ocurre. En Cataluña se pueden alquilar habitaciones a turistas en viviendas habituales. No está regulado. De hecho, está contemplado en el proyecto de reglamento de turismo de la Generalitat".

Por su parte, Dámaris Rojas, de la Asociació Veins i Anfitrions de Barcelona, recuerda que: "Si esta persona alquiló sólo una habitación y no todo el piso, sólo debe demostrar que es residente habitual del domicilio. Ello debería truncar el expediente".

Ahora solo falta esperar a la resolución del caso. Lo que está claro es que las cosas se están poniendo muy difíciles para los propietarios de viviendas turísticas o "semiturísticas" en Barcelona. 

Te recomendamos

Ver más