Finlandia prohíbe la entrada de turistas rusos. Así lo ha decidido el Gobierno en plena escalada migratoria hacia el país nórdico tras el llamado a filas de parte de la población anunciado por el presidente de Rusia, Vladímir Putin.
Tal y como ha explicado el ministro de Exteriores finlandés, Pekka Haavisto, en declaraciones recogidas por Europa Press, la nueva medida ha entrado en vigor este viernes 30 de septiembre y estarán vigentes “hasta nuevo aviso”.
No obstante, las autoridades finlandesas han fijado una serie de excepciones a este cierre de fronteras: vistas familiares o viajes de estudio o de trabajo, entre otros.
La agencia de fronteras europeas (Frontex) ha informado de que, entre 19 y el 25 de septiembre, más de 42.000 personas atravesaron la frontera terrestre entre Rusia y Finlandia. Ahora, con estas medidas, el Gobierno prevé reducir esa cantidad en al menos la mitad.
