El nuevo presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ya había anunciado en su campaña electoral que, de ganar las elecciones, pondría a la venta la flota de aviones y helicópteros del Gobierno.
Dicho y hecho. El pasado lunes, 3 de diciembre, el Gobierno de México anunció, por medio de su cuenta oficial de Facebook, la venta del avión presidencial; un Boeing 787 Dreamliner, que pasó a formar parte de la flota de la Fuerza Aérea Mexicana en febrero de 2016.
“¡Se va a California y se pone en venta!”, reza la publicación emitida en la red social. Lo cierto, es que el avión se desplazó el pasado lunes al Aeropuerto de Victorville (VCV), en California (EE.UU), donde la misión de mantenimiento será efectuada por una tripulación de la Fuerza Área Mexicana, tal y como informó EnElAire. Por este proceso, también pasará el resto de la flota, conformada por 60 aviones y 70 helicópteros.
En la publicación de Facebook, a su vez, se detalló el tipo de avión que es (presidencial), su marca (Boeing 787 Dreamliner), así como su estado (seminuevo) y categoría (muy lujoso). Asimismo, el post viene acompañado de diferentes fotos de la aeronave.
La publicación ha tenido gran repercusión entre los usuarios de Facebook, ya que ha alcanzado 10.000 reacciones, 9.277 compartidos y hasta 4.986 comentarios. Entre las opiniones de los usuarios, destaca la de Óscar Ramírez, quien reparó en “la mala costumbre de no poner el precio”. Mientras, Eli Campos resaltó que el “nuevo presidente, en pocos días, logró cumplir una promesa de campaña”. Jonathan W. Hernandez Hamilton, por su parte, le comentó a López Obrador que lo vería en el metro.
Cuando el presidente mexicano advirtió sobre esta acción en campaña, incluso, le ofreció la aeronave a su homólogo estadounidense: Donald Trump. Entonces, realizó el anuncio por medio de un vídeo que también fue publicado en redes sociales y donde desvelaba su precio, 7.500 millones de pesos (308,8 millones de euros), y comentaba que se trataba de un “monumento a la corrupción”.
