La aerolínea eslovena Adria Airways ha informado que todos sus vuelos a partir de hoy miércoles han sido cancelados por falta de fondos.
Según informa 24-horas.mx, la empresa ha comunicado que se trata de una medida provisional pero que su futuro es incierto: “La decisión de suspender temporalmente las operaciones de vuelo es consecuencia de que actualmente no tiene acceso asegurado al efectivo que la aerolínea necesita para futuras operaciones”.
Es por ello que desde la compañía están buscando posibles inversores con el fin de que se puedan retomar las operaciones.
Recientemente la compañía firmó un nuevo convenio colectivo con la Asociación de Pilotos de Aerolíneas de Eslovenia para evitar una huelga anunciada para finales de septiembre y principios de octubre.
Adria Airways fue fundada en 1961 y ofrece vuelos regulares y chárter desde y hacia varios destinos europeos con una flota de 20 aviones.
Aerolíneas europeas quebradas
En los últimos años, se ha producido el cese de numerosas líneas aéreas europeas. Si se obvia la situación de las aerolíneas de Thomas Cook, la última en declarar su insolvencia fue la francesa Aigle Azur este mismo mes de septiembre. El pasado marzo, fue el turno de la islandesa WOW Air que definitivamente ha sido rescatada por la estadounidense USAerospace Associates. En febrero de 2019, por su parte, quebraron flybmi y Germania. En 2018, mientras, desaparecieron la filial alemana de Small Planet; la danesa Primera Air; la belga VLM; la griega Olympus; la filial alemana de Azur Air (aerolínea del touroperador Anex Tour); la suiza SkyWork; la hispano-venezolana Santa Bárbara Airlines; la británica Cello Aviation; o la chipriota Cobalt Air.
En el año 2017 quebraron las aerolíneas Monarch, Air Berlin y Niki, que resurgió bajo el amparo de Ryanair como Laudamotion, así como por la deriva económica de una Alitalia declarada insolvente, que actualmente está bajo control estatal.
Cabe destacar, la reciente eliminación de Joon, la ‘low cost’ para millennials del grupo Air France-KLM, aunque su desaparición se achacó a una decisión estratégica del conglomerado franco-holandés.