Boeing ha despedido este miércoles Ed Clark, vicepresidente y director general del programa de aviones 737 MAX, foco de un sinfín de problemas de fabricación y fiabilidad. El fabricante estadounidense ha tomado esta drástica decisión un mes después del grave incidente que afectó a una aeronave de Alaska Airlines, que perdió parte del fuselaje en pleno vuelo, provocando una descompresión explosiva.
El medio alemán DW informa de que el despido ha sido comunicado por el vicepresidente ejecutivo y CEO de la división de Aviones Comerciales de la de Boeing, Stan Deal, en una nota dirigida a los trabajadores de la compañía.
La salida de Clark, que atesoraba una trayectoria de 18 años ligada a los 737, se produce tras tres años al frente de la división destinada a estos aparatos. El ejecutivo, que era también director general de la fábrica de Boeing en Renton (Washington), será sustituido en ambas funciones por Katie Ringgold, hasta ahora supervisora de las entregas de este modelo a los clientes.