La pandemia del covid supuso la popularización de los bonos canjeables, con los que las aerolíneas permitían reutilizar el dinero invertido en un vuelo en un plazo determinado, en lugar de devolver el importe del billete. Estos vales no son nominales, por lo que se pueden transferir a otras personas, facilitando su utilización, sin embargo, también presentan el riesgo de que sean aprovechados por terceros que acceden a ellos de manera ilegal.
Según recoge El Mundo, varios clientes de Iberia se han visto afectados por esta actividad fraudulenta. Una empresaria residente en la Comunidad Valenciana invirtió “unos 3.000 euros” en dos billetes para viajar a Perú, pero finalmente tuvo que cancelar el viaje y la compañía le facilitó dos bonos canjeables.
El revés llegó el pasado viernes 11 de enero, cuando recibió un correo electrónico de Iberia en el que se le informaba de que los bonos habían sido unificados sin haberlo solicitado. Una hora más tarde, la empresaria valenciana recibió otro correo “diciendo que había reservado un vuelo de 1.600 euros de Madrid a Bogotá”.
Si hay tantos bonos de Iberia, hay millones de euros a los que la gente puede acceder”
Tras el shock inicial, la afectada realizó una búsqueda en Internet y descubrió otros casos similares. En su caso, según detalla, puso una denuncia ante la Policía Nacional y la Agencia Española de Protección de Datos debido a la “falta de controles de seguridad” que hubo sobre sus datos personales. “Terceros pudieron acceder a ellos y causarme un perjuicio económico, así como el envío a mi correo personal de los datos personales de dichos terceros, incluyendo información tan sensible como nombre, apellido y hasta pasaporte, un clarísimo riesgo de suplantación de identidad”.
Tras recibir otra notificación con otro vuelo a Bogotá por valor de 500 euros, la empresaria volvió a ponerse en contacto con Iberia y, tras presentar la denuncia, la compañía le devolvió el bono íntegro. “Si hay tantos bonos de Iberia, hay millones de euros a los que la gente puede acceder. Son una empresa grande y, si no te puedes fiar de ellos, ¿dónde compras los vuelos?”, se cuestiona la afectada.