Disneyland París se tiñó de los colores del arco iris el pasado sábado, 1 junio, para celebrar su primer desfile del orgullo gay. Se trata del Magical Pride Party, una estrategia del parque de atracciones para visibilizar y normalizar al colectivo LGTB.
Según ha informado La Vanguardia, el evento se desarrolló bajo el eslogan Vístete de ensueño, siéntete genial y disfruta del parque como nunca antes e incluyó entradas para el recinto, un desfile (en el que participó la actriz española Rossy de Palma), karaoke y dj, entre otras actividades.
El colectivo LGTB ha organizado actos no oficiales, con motivo del orgullo gay, en los parques Disney de Estados Unidos y París, desde 1991. En los últimos años, operadores de viajes privados y asociaciones independientes se han encargado de celebrar este tipo de eventos con el consentimiento de Walt Disney Company, congregando a unas 150.000 personas cada año. En esta ocasión, la compañía ha sido la responsable de su organización por primera vez.
Lo cierto es que la conversión de los parques Disney en LGTB friendly ha sido criticada por los más conservadores. Por este motivo, la Convención Baptista del Sur de Estados Unidos inició un boicot contra los parques y películas de la compañía en 1991. Disney, sin embargo, prosiguió con su política igualitaria y en 2007, ocho años antes de la legalización del matrimonio gay en este país, permitió las bodas homosexuales en el castillo de la Cenicienta. Un movimiento con el que facturó importantes sumas económicas, entre 8.000 y 45.000 dólares por enlace.
La última película de acción de la compañía, Jungle Cruise, cuenta con el primer personaje de Disney abiertamente gay, el cual ha desatado algunas críticas por perpetuar algunos estereotipos de la cultura homosexual.