Emirates se fusionará con la compañía ‘low cost’ Flydubai a finales de 2018. Ambas aerolíneas son de propiedad estatal y comparten base en el Aeropuerto Internacional de Dubái.
Flydubai fue fundada en 2008, y pese a que en sus comienzos se apoyó en Emirates, opera su flota indpendiente compuesta por 55 Boeings 737-800, manteniéndose fuera del conglomerado Emirates Group.
El grupo es propiedad de Dubái y está dirigido por el Seij Ahmed bin Saeed Al Maktoum, Chairman y CEO, y por Tim Clark, presidente. Justamente Clark fue el encargado de confirmar que se espera que la fusión de las dos compañías se produzca en los próximos 18 meses.
Así, la bajo coste podría convertirse en un punto de apoyo importante del grupo aéreo que últimamente ha afrontado numerosos contratiempos con el veto migratorio impuesto en Estados Unidos. La idea sería trasladar el negocio a África Central, Sur de Asia, Europa y el propio Oriente Medio.
Actualmente, Flydubai se caracteriza por permitir tan sólo un equipaje de mano de 10 kilogramos, teniéndose que pagar los bultos adicionales; el precio de los billetes tampoco incluye las comidas a bordo.