La Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA) detectó un nuevo “riesgo potencial” en los Boeing 737 MAX, durante una prueba de simulador efectuada la semana pasada. Aunque no especificó de qué se trataba, enfatizó que debe ser mitigado por Boeing.
Los aviones B737 MAX permanecen en tierra desde el pasado marzo, tras protagonizar dos accidentes mortales en Indonesia y Etiopía. Las investigaciones preliminares de ambos siniestros apuntaban a fallas en el sistema de antibloqueo MCAS. Posteriormente, Boeing reconoció la implicación de este software en las catástrofes.
Según ha informado BBC, el fabricante estadounidense tenía previsto devolver el B737 MAX a los cielos este verano, tras actualizar y mejorar el sistema MCAS, mecanismo que puede evitar que un avión se estrelle. No obstante, la FAA reparó en un comunicado que "levantará la prohibición de vuelo sobre el aparato" cuando considere que es seguro.
De acuerdo con el diario citado, la agencia Reuters, la primera en informar de este nuevo error, manifestó que el problema radica en el sistema de conexión entre el motor y el sistema de conexión. Otras voces apuntan a una falla relacionada con la potencia del computador de vuelo, del que se duda que tenga capacidad suficiente para recibir actualizaciones.
Por su parte, Boeing emitió un comunicado en el que asegura que está “trabajando estrechamente con la FAA”, para que el B737 MAX vuelva a operar “de forma segura”. Asimismo, consideró que una actualización del software podría solucionar el problema.