Airbnb se ha impuesto en la batalla que mantenía contra los hoteleros ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE). El máximo tribunal comunitario ha determinado que la empresa con sede en San Francisco (California, EE.UU.) no debe ser tratada como una compañía inmobiliaria, sino como una plataforma online.
Según informa Turizmus, la Asociación de Profesionales Hoteleros y Turísticos de Francia (AhTop) había presentado una demanda para que a Airbnb se le aplicara la ley inmobiliaria francesa (Loi Hoguet) por la cual la plataforma tendría que haberse acogido a una tributación diferente.
Desde el lobby galo argumentaban que Airbnb era un “agente inmobiliario”, sin embargo, tras considerarlo el TJUE ha rechazado el supuesto basándose en que la principal actividad de Airbnb no es el sector inmobiliario, sino que es una plataforma que conecta a propietarios con individuos que buscan alojamiento.
Desde la empresa online han celebrado el fallo y han explicado que seguirán “trabajando con las ciudades en regulaciones claras”. Asimismo, han insistido en que quieren ser buenos socios de las autoridades y los gobiernos, “siguiendo las normas y pagando los impuestos”.