Con el fin de evitar la quiebra, la dirección de la compañía Alitalia tiene previsto recortar los sueldos de los pilotos y la tripulación de cabina de manera significativa. Ante esto, los sindicatos han convocado una huelga el 23 de febrero.
De acuerdo con los informes publicados por los medios, los trabajadores se enfrentan a recortes salariales de hasta el 20%. Además también se verían recortadas las vacaciones y los aumentos de sueldo relacionados con la edad solo se llevarían a cabo cada cinco años. Alitalia quiere reducir de esta manera sus pérdidas a 1 millón de euros por día.
Esta es la tercera reestructuración importante a la que se enfrenta la aerolínea después de las sufridas en 2008 y 2014. De acuerdo con las especulaciones, esto también podría implicar la supresión de 1.500 puestos de trabajo.