“Donde dije digo, digo diego”. Este popular dicho del refranero español se puede aplicar perfectamente a la cadena de supermercados alemana Lidl que, el pasado mes de julio, anunció a sus proveedores que abandonaba la venta de viajes y, ahora, comunica que revoca su decisión.

Según informa FVW, la minorista tenía previsto dejar de organizar viajes a partir de diciembre. De hecho, a través de su página web —Lidl-Reisen.de— no se podían hacer reservas una vez concluido el citado plazo. Pero ahora continuará comercializando paquetes de vacaciones como lo había venido haciendo.

El cambio de idea de Lidl ha sido visto con muy buenos ojos con sus socios comerciales, a los que, si bien les había comunicado su decisión, aún no había rescindido los contratos, por lo que podrán mantener la colaboración sin problemas.

Lidl inició su andadura como punto de venta de viajes en diciembre de 2006, compitiendo de tú a tú con su rival Aldi. En 2016 se adentró en la touroperación con la creación de Lidl Holidays, a la que en 2018 se sumó JT Touristik. Su división de viajes llegó a tener empleadas a 140 personas y tenía planes de expansión geográfica. Sin embargo, tras estallar la pandemia, decidió ponerle fin a toda esta rama del negocio, manteniendo solo la venta de viajes, que se estima que factura unos 200 millones al año, operando en Alemania, Austria y Suiza.