Mientras que algunos países como Austria o Alemania están trabajando en leyes que hagan obligatoria la vacunación, Michael O’Leary, CEO del grupo Ryanair (Ryanair, Lauda, Buzz y Malta Air), considera que podría suponer una violación de las libertades civiles y aboga, por tanto, por “hacer la vida difícil” a los antivacunas, a los que denomina “idiotas”.
“Si no está vacunado, no se le debería permitir la entrada al hospital, no se le debería permitir volar, no se le debería permitir usar el metro de Londres y no se le debería permitir acceder al supermercado local o tu farmacia tampoco”, Ha declarado al Telegraph.
El directivo del grupo aéreo se ha mostrado enfadado con la actitud de algunos pasajeros que han provocado incidentes. Sin ir más lejos, el 15 de diciembre, las fuerzas de seguridad tuvieron que intervenir en un avión de Ryanair, que se preparaba para el despegue en el aeropuerto de Londres-Stansted (Reino Unido) rumbo a Dublín (Irlanda). Un pasajero se saltó el control del Certificado Digital Covid y a bordo tuvo un arrebato de ira gritando que las vacunas son “veneno” y que se está estableciendo un “nuevo orden mundial”, todo ello, con la mascarilla bajada. El hombre fue desalojado del vuelo.