La aerolínea belga VLM se ha declarado en quiebra y ha suspendido todas las operaciones desde el pasado lunes 3 de septiembre.
Según informa Business Traveller, este cese de la actividad se produce tan solo un año después de haber retomado sus operaciones. Y es que esta empresa, ya se había declarado en bancarrota en 2016 y tuvo que ser rescatada por la empresa Antwerp Aviation, volviendo a los cielos en octubre de 2017.
La compañía ha informado que reembolsará el dinero a los pasajeros que ya habían realizado sus reservas y que se han visto afectados. Actualmente, contaba con una flota de siete aviones (5 Fokker 50, un A320 y un A321) con los que operaba servicios desde Amberes (Bélgica) hacia Birmingham y Manchester (Inglaterra); Colonia-Bonn, Múnich y Rostock (Alemania); Aberdeen (Escocia), Maribor (Eslovenia) y Brujas (Bélgica).
VLM comenzó a mostrar síntomas de agotamiento este mes de agosto, cuando tuvo que suspender seis de sus ocho rutas.