Desde marzo de 2020 a septiembre de 2021, los aeropuertos de Reino Unido registraron cerca de 15.000 vuelos fantasma en lo que respecta a operaciones internacionales. La media durante el citado período fue de 760 vuelos de este tipo al mes.
Se trata de aviones que vuelan vacíos o por debajo del 10% de su capacidad por varios motivos como que las aerolíneas puedan conservar sus franjas horarias en los aeropuertos (no obstante, durante la pandemia estas exigencias se han relajado) o para que los pilotos puedan contar con las horas suficientes de vuelo para los certificados.
Según los datos recogidos por el diario especializado Travelmole, el aeropuerto de Londres-Heathrow fue el que registró un mayor número de estos vuelos, con cerca de 4.910. Por su parte, Manchester y Londres-Gatwick superaron los 1.000.
Los vuelos fantasma suponen un gran esfuerzo económico como un duro impacto al medioambiente, además de provocar ineficiencias en los aeropuertos.