Cerca de 200 personas, entre pasajeros y tripulantes de un vuelo de TUI UK & Ireland, que conectó Zante (Grecia) con Cardiff (Reino Unido) el 25 de agosto, se han visto obligados a cumplir cuarentena, después de que siete personas de tres grupos diferentes dieran positivo en Covid.
Según ha informado BBC, TUI ha iniciado una investigación sobre lo ocurrido, después de que la pasajera Stephanie Whitfield emitiera una serie de quejas y criticara el vuelo. Y es que, al parecer, algunos viajeros incumplieron el uso obligatorio de la mascarilla, ante lo que la tripulación de cabina permaneció impasible.
"Este vuelo fue una debacle. El tipo que estaba a mi lado tenía su mascarilla alrededor del cuello. La aerolínea no solo no reparó en ello, sino que le dieron una bebida gratis cuando dijo que conocía a un miembro de la tripulación", señaló Whitfield al medio citado. "Mucha gente se quitaba las mascarillas y deambulaba por los pasillos para hablar con los demás. Tan pronto como el vuelo aterrizó, un montón de gente se quitó los tapabocas inmediatamente", agregó.
La compañía, por su parte, aseguró en un comunicado: "La salud y la seguridad de los pasajeros es siempre nuestra prioridad y nos preocupa oír las reclamaciones de la Sra. Whitfield". "Nuestra tripulación está entrenada con los más altos estándares y en línea con las directrices de la Agencia de Seguridad Aérea de la Unión Europea (EASA)", añadió.
A posteriori, aclaró que los pasajeros son informados sobre el uso de la mascarilla, que deben llevar durante todo el viaje. Tan solo se la pueden quitar cuando consumen comida o bebidas. Tampoco "se les permite moverse por la cabina".