Virgin Australia, la segunda mayor aerolínea del país oceánico y propiedad de Virgin Group, se declaró insolvente el pasado abril, debido a la crisis del COVID-19. Ahora, su administradora, la gestora internacional Deloitte, ha anunciado que cuenta con cuatro pretendientes "altamente acreditados".
Según ha informado TravelMole, se trata de las empresas de inversión Bain Capital, Cyrus Capital Partners, BGH Capital y la estadounidense Indigo Partners, que tiene intereses en diferentes 'low-cost' como Wizz Air, Frontier Airlines, Volaris y JetSMART. En este sentido, Deloitte puso de relieve que todas las compañías preseleccionadas cuentan con "sólidas credenciales de aviación".
A este respecto, el administrador principal, Vaughan Strawbridge, señaló que recibieron más propuestas de las que esperaban. "Estamos encantados por la fuerza de cada uno de los que están en la lista de preseleccionados, que están bien financiados", aseveró. Lo cierto es que Bain Capital y Cyrus Capital Partners cuentan con estrechos vínculos con el fundador de Virgin Group, el magnate Richard Branson.
El objetivo, aclaró Strawbridge, es dar con la mejor "solución comercial", que proteja al mayor número de empleos posible. Cabe destacar que la aerolínea se declaró insolvente con una deuda de cerca de siete millones de dólares australianos. Las compañías preseleccionadas deben enviar sus ofertas finales antes del 12 de junio.
Entre aquellos que se han quedado a las puertas de pujar por Virgin Australia, figuran el gobierno del estado australiano de Queensland o InterGlobe, con sede en la India y empresa matriz de la bajo coste IndiGo.