La Asociación de Clubes de Baloncesto (ACB) está estudiando la posibilidad de completar el programa de partidos de la Liga Endesa 2019-2020 en Canarias. La competición está parada desde el pasado 11 de marzo con aún 11 jornadas sin jugar, además de dos partidos adicionales aplazados y los playoffs.

Tal y como informa Mundo Deportivo, la idea que está valorando ACB es completar el calendario concentrando a todos los equipos en las Islas Canarias, región que ha registrado menos de 2.000 casos de contagio y con una tasa de 4,28 fallecidos por cada 100.000 habitantes.

La decisión de los principales clubes de baloncesto del país sería clave para contribuir a la recuperación del sector turístico de Canarias, tanto mediante la ocupación de plazas hoteleras como a la difusión de la imagen del destino tanto a nivel nacional como internacional.

Desde la entidad deportiva planean jugar los encuentros a puerta cerrada, pero cumplir con los contratos televisivos. En cuanto a sedes, el archipiélago dispone de dos pabellones de máxima categoría como son el Santiago Martín de La Laguna (Tenerife) y el Gran Canaria Arena (Gran Canaria). Asimismo, otros estadios disponibles son el de La Palma y el Quico Cabrera de Santa Cruz de Tenerife, puesto que pese a no contar con el aforo exigido por la ACB (3.500 localidades), sí que podrían acoger partidos al ser sin público. A ellos también se podría sumar el Centro Insular de Deportes de Gran Canaria. No obstante, abogarían por concentrar todos los partidos en una sola isla con el fin de evitar desplazamientos en avión innecesarios.

Los equipos, por su parte, se repartirían en diferentes hoteles y deberían someterse a test previos a desplazarse a Canarias con el fin de garantizar que no están contagiados. Además, se les realizarán pruebas regulares y se mantendrían las medidas de higiene y distanciamiento social.

De esta forma, sería la liga de baloncesto quien recoge el guante lanzado por la Asociación Hotelera y Extrahotelera de Tenerife, La Palma, La Gomera y El Hierro (Ashotel) que propuso a la Federación Española de Fútbol y a la Liga de Fútbol Profesional que estudien la posibilidad de terminar en Canarias los partidos que restan de temporada, tanto de Primera como de Segunda División.

Para convencer a las entidades apelaban a la condición de insularidad y lejanía que han provocado que Canarias sea una de las regiones españolas menos golpeadas por el Coronavirus,  la planta hotelera y extrahotelera de calidad, las infraestructuras deportivas homologadas y las temperaturas suaves durante los meses de verano.

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