Muchas comunidades autónomas están siguiendo los pasos de Cataluña y de Baleares en lo que respecta a imponer normas más estrictas para el uso de la mascarilla. Es el caso de Andalucía, que obligará a usar esta protección aunque se pueda mantener la distancia social tanto en espacios abiertos como cerrados
Tal y como informa El Mundo, este martes ha aprobado la regulación que obliga a usar el tapabocas bajo amenaza de multa de 100 euros. En playas y piscinas las mascarillas no serán necesarias durante el baño ni mientras se permanezca en la sombrilla, pero sí para pasear o cuando no se pueda respetar la distancia de 1,5 metros.
Pese a que ya en Baleares algunas asociaciones hoteleras criticaron la medida aseverando que podría espantar al turismo, desde el ejecutivo andaluz abordan la implantación de la medida desde otra perspectiva: explican que justamente con ella se evitará la turismofobia contra los extranjeros que se niegan a utilizar la protección de forma voluntaria. Creen que al exigirlo a todo el mundo se evitará cualquier tipo de conflicto al respecto.
Otras comunidades siguen los pasos
Aragón, La Rioja, Murcia y Extremadura ya han aprobado normas similares, aunque con sus propias particularidades sobre el uso en playas, piscinas, práctica del deporte, etc. Galicia y Euskadi sólo exigen el uso de mascarilla obligatorio en los municipios donde se han registrado rebrotes.
Por su parte, Asturias, Navarra, Cantabria y Canarias ya están estudiando la posibilidad de implantar esta medida más restrictiva.