La Comisión para el Fomento del Civismo en las zonas turísticas de Baleares ha hecho balance de las actuaciones derivadas del decreto ley contra el turismo de excesos. En lo que llevamos de verano —algo más de mes y medio—, se han incoado ocho expedientes de cierre y se han levantado 90 actas por infracciones contra locales de ocio.
Este decreto ley fue aprobado por el Govern en enero 2020 pero, por causas de la pandemia, sus efectos no se han podido comprobar hasta esta temporada alta 2022 en las tres localidades a las que afecta: Magaluf y Playa de Palma, en Mallorca, y Sant Antoni de Portmany, en Ibiza.
Según informa Última Hora, en Magaluf ya se han producido cuatro cierres cautelares de locales de ocio y dos de los establecimientos clausurados han sido denunciados por cosificación y trato denigrante de la figura de la mujer, ya que mantenían a tiqueteras en ropa interior para captar clientela. Con respecto a los otros dos locales, el cierre cautelar se ha producido por vulnerar el límite horario de venta de alcohol al público.
Por su parte, en la localidad ibicenca de Sant Antoni de Portmany existen cuatro propuestas de cierre que están actualmente en trámite por venta de alcohol fuera de horario y a menores. En este caso, el consistorio local todavía no ha concretado ninguna propuesta de cierre, aunque ha señalado que se han realizado precintados de equipos de sonido en distintos establecimientos por infringir la normativa de ruidos.