El consistorio de la ciudad de Barcelona ha anunciado que no presentará su candidatura para ser sede de los Juegos Olímpicos de invierno de 2026. Así lo ha informado Jaume Collboni, segundo teniente de alcalde que ha asegurado que es una decisión basada en la falta de “acuerdo global” para la celebración del evento deportivo.
Esto significa que no se ha llegado a un consenso entre el Ayuntamiento de la Ciudad Condal, la Generalitat Catalana y los municipios del Pirineo que debían albergar las pruebas.
No obstante, no se descarta que un futuro se puedan retomar las intenciones de convertir a Barcelona en la capital mundial de los deportes de invierno, ya que la comisión que ha evaluado la idoneidad de ser sede de los Juegos Olimpicos ha dejado las puertas abiertas a esta posibilidad en caso de lograrse un consenso político actualmente inexistente.
Este tipo de celebraciones podrían suponer un impulso tanto para atraer a los turistas que están interesados en el esquí y el resto de deportes de invierno como para mostrar la riqueza paisajística al resto del mundo a través de la amplia cobertura mediática.