Barcelona está desplegando este verano un ambicioso plan para luchar contra la delincuencia que se ceba tanto con residentes como con turistas y que ha sido elogiado por los medios británicos. Sin embargo, los grupos criminales están aumentando su violencia y atacando a plena luz del día con el objetivo puesto en los relojes de valor que portan los transeúntes.
De hecho, tal y como informan los medios locales, entre ellos El Periódico, La Vanguardia o El Nacional, en las últimas semanas se han contabilizado al menos tres ataques de las bandas organizadas de “relojeros”. Los dos más recientes tuvieron lugar durante la jornada del domingo.
Una de ellas, que fue grabada en vídeo, sucedió junto a la Catedral de Barcelona, en la Via Laietana. La víctima fue un turista de mediana edad que fue asaltado por un hombre corpulento que tiró de su reloj y, que tras un forcejeo en el que casi invaden la calzada, consiguió hacerse con el botín. Los Mossos d'Esquadra, que investigan el incidente, creen que el objeto robado está valorado en 200 euros. La víctima sufrió rasguños y heridas superficiales.
Ese mismo día también se reportó un ataque contra un chico joven, que fue agredido por un grupo de, al menos, tres personas cuando salía de su casa en la calle de Cardenal Reig, en el distrito de las Corts. En este caso, le arrebataron su reloj —un Rolex valorado en 8.000— y otras pertenencias, y que sufrió lesiones por las que fue trasladado al centro médico.
Otro de los casos más mediáticos, ocurrido la pasada semana, fue el de un turista norteamericano que denunció haber sufrido un asalto en la calle de los Lledó, en Ciutat Vella. La víctima relató haber sido asaltado por un grupo de cuatro personas que podrían llevar armas blancas. Si bien denunció que el reloj sustraído era una edición de lujo de Hublot valorada en 800.000 euros, las indagaciones posteriores apuntan a que su coste se ubicaría en los 43.000 euros.
Buscando soluciones
Desde las instituciones se buscan soluciones para hacer frente a estos grupos organizados que aprovechan la gran afluencia de visitantes a la Ciudad Condal. Por ejemplo, los propios Mossos crearon el pasado mes de marzo una unidad especializada para localizar y detener a los autores de este tipo de delitos.
Además, a nivel legislativo se está trabajando en un proyecto de ley Orgánica para endurecer el Código Penal y frenar la multirreincidencia de pequeños hurtos.