Desde el año 2015, la construcción de nuevos hoteles en el centro de Barcelona lleva congelada. Desde entonces, solo se han podido llevar a cabo aquellos proyectos que contaban con licencia previa. Ahora, el nuevo alcalde de la Ciudad Condal, Jaume Colboni, se abre a la posibilidad de excepciones.
En concreto, considera la posibilidad de que se puedan abrir en el casco antiguo nuevos establecimientos siempre que sean de pocas habitaciones y ubicados en edificios singulares, recoge El Periódico.
Eso sí, pese a ser proclive a debatir sobre la creación de pequeños “hoteles joya” que atraigan clientes de alto poder adquisitivo, se mantiene tajante con respecto a mantener el Plan Especial Urbanístico de Alojamiento Turístico (PEUAT), recalcando que el “criterio general es que no se incrementarán las plazas hoteleras en el centro de la ciudad”, porque están en el límite óptimo y “en las zonas no tensionadas aún se pueden construir". En concreto, es posible construir aún 4.000 nuevas plazas hoteleras en las denominadas zonas 3 y 4.
Por otra parte, Colboni también ha revelado sus intenciones en lo que respecta a los cruceros, aseverando que trabajará para que la ciudad se convierta en base, pero que se rebaje el número de escalas de apenas unas horas.