El alcalde de Barcelona, Jaume Colboni, ha anunciado este sábado su intención de reducir “muy significativamente” el número de viviendas de uso turístico, sobre todo en las zonas con más presión turística y más densidad”, como es el caso del distrito de Ciutat Vella. Este anuncio llega tras haber abierto la posibilidad a nuevos de hoteles en estas mismas zonas saturadas.
“Aprovecharemos a fondo el decreto que tiene que sacar la Generalitat de Cataluña, en el sentido de tener una visión restrictiva de los pisos turísticos”, ha explicado el regidor en declaraciones recogidas por El País. El citado decreto ha recibido la total oposición de la patronal autonómica de las viviendas turísticas, Federatur, que ha amenazado con pedir indemnizaciones millonarias.
Una medida “turismofóbica”
Por su parte, desde la presidente de la patronal de barcelonesa de pisos turísticos, Apartur, han rechazado frontalmente la medida. Su presidente, Enrique Alcántara, se ha cuestionado qué pasará cuando llegue “un Mobile World Congress o una Copa América” si la oferta de camas se reduce y ha tachado la medida de “turismofóbica”. “Collboni expresa que no quiere turismo familiar, es muy grave”, ha señalado al citado diario.