La portavoz de la asociación Las Kellys —camareras de piso— de Benidorm (Alicante), Yolanda García, ha anunciado que en los próximos meses pasarán por un proceso de reconversión a sindicato, al no sentirse representadas por UGT y CC. OO. de cara a mejorar sus condiciones laborales en la negociación de un nuevo convenio colectivo con la patronal.
Desde la asociación, que defiende los derechos de las camareras de piso de hoteles y demás complejos alojativos, denuncian que ambos sindicatos han desoído sus demandas. “No han respondido a nuestra petición de reunión porque saben qué es lo que les vamos a pedir”, ha señalado la portavoz en declaraciones a El Español.
Tampoco parecen tener noticias de la Conselleria de Economía Sostenible de la Comunidad Valenciana, cuya directora, Elvira Ródenas Sancho, se reunió con la asociación el pasado junio para ofrecerles la posibilidad de participar en las mesas de diálogo en las que se sentarían junto a patronal, sindicatos y administración.
Es por esto que Las Kellys de la Costa Blanca han optado por "la solución más lógica" y decidido pasar a la acción y convertirse en sindicato. "Es la única manera porque como asociación hemos hecho muchas cosas, pero nos frenan en muchos sitios", insiste García.
Disputa por el nuevo convenio y próxima huelga
El nuevo convenio colectivo que tratarán próximamente sindicatos, patronal y Administración sustituirá al anterior, vigente entre 2014 y 2019 y prorrogado hasta la actualidad por la pandemia. Sin embargo, Las Kellys hacen hincapié, como hace cinco años en la anterior negociación, en sus dos principales líneas rojas: ponerle freno a la externalización del servicio de limpieza y la carga de trabajo.
Toda esta situación la reivindicará el colectivo de camareras de piso de forma pública el próximo 27 de septiembre, Día Internacional del Turismo, en una huelga en la que protestarán, sobre todo, por la sobrecarga laboral y en favor de un "convenio laboral justo".