Son días convulsos para el Málaga CF. A su virtual descenso a la Segunda División del fútbol español se suman los diferentes enredos judiciales en los que está involucrado el jeque Abdullah Al-Thani, actual máximo accionista de la entidad blanquiazul.
Al-Thani mantiene una disputa judicial con la compañía BlueBay. La hotelera, tras haber cedido su paquete del 49% en 2013, quiere recuperar las acciones y, por tanto, hacerse con el control de la entidad deportiva.
El jefe qatarí posee actualmente el 96,8 de las acciones del Málaga CF (565.861 acciones), en las que se incluye el citado paquete que en su día adquirió por un euro pero que hoy está en disputa por supuestos incumplimientos del acuerdo. El resto de las acciones están en manos de aficionados malaguistas que las adquirieron cuando el club realizó una ampliación de capital en 2011.