El Centro de Iniciativas y Turismo Insular (CIT) Tedote-ASDETUR  de La Palma se ha volcado en la tarea de realojar en establecimientos hoteleros y extrahoteleros a las personas que han perdido sus casas por el avance de la lava expulsada por el volcán de Cumbre Vieja, así como evacuar a los turistas a otras islas o hacia sus lugares de residencia.

La colaboración del sector turístico de La Palma está siendo encomiable, pese a la reducida capacidad alojativa de la isla, que cuenta con menos de 5.000 plazas turísticas. “La disponibilidad de plazas turísticas, poniéndolas a disposición de las autoridades palmeras para el realojo de las familias afectadas en estos momentos de enorme dolor por el drama humano y económico que está dejando tras de sí el recorrido de la lava, es ahora una prioridad”, ha declarado el presidente del CIT Tedote-Asdetur, Óscar León, cuya asociación está en coordinación permanente con los ayuntamientos afectados por la erupción y el Cabildo insular.

Prioridad por encima de las reservas

Desde la organización turística isleña agradecen la iniciativa de los directores de alojamientos turísticos de La Palma, que han paralizado nuevas reservas para contar con el mayor número posible de camas turísticas y así poder atender las necesidades de las familias afectadas por el volcán. Muchos de estos alojamientos acogen, además, a los técnicos, militares y personal desplazado para atender la situación de emergencia.

“Este es el momento de atender a personas, niños y mayores, hombres y mujeres que lo han perdido todo por el devastador efecto de este volcán. Es importante poner a disposición de las autoridades los recursos técnicos y humanos con los que contamos, para que ellos dirijan las acciones en favor de los que más lo necesitan, dejando en un segundo plano, por el momento, los proyectos de promoción que puedan revertir esta situación y que sin duda serán puestos en marcha tras una evaluación de las pérdidas”, ha subrayado León en declaraciones a El Time.

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