El Gobierno de Canarias quiere implementar, por primera vez, un sistema digital de 'tax free' que permita devolver de forma ágil el Impuesto General Indirecto Canario (IGIC) a los turistas que realicen compras en las Islas Canarias. Sin embargo, la propuesta del ejecutivo autonómico prescinde de terceras empresas y quiere concentrar toda la tramitación únicamente a través de la Agencia Tributaria de Canarias.

Todo visitante de la Península, Islas Baleares, Ceuta, Melilla, otros Estados miembros de la Unión Europea o de terceros países con acuerdo recíproco tiene derecho a reclamar la devolución del IGIC de aquellas compras que haya realizado durante su estancia. Dicha reclamación se realiza en la aduana, antes de abandonar el destino. En el caso de Canarias, desde hace tiempo se criticaba el difícil proceso que se imponía a los turistas para recuperar su dinero, y es que Canarias era la única comunidad que no contaba con un sistema digital para ello. Ahora, el decreto pretende agilizar el trámite, aunque ha optado por un modelo diferente al estatal denominado DIVA, considerado como el mejor de Europa.

Y es que el Gobierno de Canarias quiere ser el responsable único de devolver los impuestos a los turistas, abonando el 100% del importe en un plazo de seis meses. Esto difiere del sistema DIVA en el que se da la opción al visitante de decidir:

1. si prefiere que lo gestione la Agencia Tributaria (AEAT) —recibiendo el 100% del importe unos meses después—
2. O que lo haga un operador especializado en 'tax free' —que cobrará al turista una comisión por encima del 27%, pero que le dará su dinero al instante—.

"Condenado al fracaso"

Según recoge Canarias 7, representantes del sector comercial canario afirman que la propuesta está "condenada al fracaso" y piden que se permita al viajero elegir si quieren esperar o recibir su dinero inmediatamente, tras el pago de la comisión de intermediación a entidades especializadas. De hecho, se posicionan a favor de este modelo, argumentando que los turistas prefieren recibir el importe de forma inmediata. Esgrimen, además, que esto es más positivo para el destino, ya que una devolución más cómoda y automática en el aeropuerto estimularía a los viajeros a que hicieran previamente, un mayor gasto en el destino, sabiendo que van a recuperar su dinero con facilidad.

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