Hace unas semanas, el Consejo General de Turisme de Barcelona (dependiente del Ayuntamiento) confirmó que dispondrá en 2023 de un presupuesto superior a los 44 millones de euros y que parte del mismo irá destinado a la Copa América de Vela—que celebrará en Barcelona la 37ª edición—. Si bien este incremento son buenas noticias para la entidad organizadora de la regata, las que llegan desde la Generalitat de Cataluña —otra de las entidades que se comprometió a financiar la competición, además del citado ayuntamiento y de la Diputación de Barcelona— son malas. De hecho, la organización de la Copa América de vela de 2024 se ha visto obligada a pedir auxilio ante el bloqueo financiero del gobierno catalán.

La organización de la regata ha acudido a la banca para pedir un préstamo para pagar los 30 millones que prometió el Govern, que no ha podido aportar la suma debido a que no se han aprobado los presupuestos para 2023. “No se puede esperar a los ritmos de las administraciones públicas”, han alegado fuentes citadas por el periódico Crónica Global.

Además, han añadido que “la Copa América tiene gastos que pagar. Es un evento caro y necesita financiación”. Aunque, cabe destacar, que el Govern se ha comprometido a devolver el dinero ya aportado por parte de la organización.

Copa América de vela, la gran apuesta

Se espera que el evento genere un total de 1.000 millones de euros en la Ciudad Condal, además de un gran impacto mediático con cerca de 950 millones de espectadores.

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