La situación sanitaria en Cataluña, una de las comunidades más afectadas por los rebrotes junto a Aragón, está complicando cada vez más su recuperación turística. La región registró 1.343 nuevos casos positivos tan solo el viernes 24 de julio. Tal es así que las autoridades se han visto obligadas a recomendar el aislamiento domiciliario, excepto por motivos esenciales, en las localidades más azotadas por los nuevos picos, y ordenaron el cierre de los locales de ocio nocturno en toda la comunidad. Ante este escenario, se ha producido una oleada de cancelaciones que ha llevado a algunos hoteles a volver a cerrar sus puertas.
Según ha informado elPeriódico, el director general del Gremio de Hoteles de Barcelona, Manel Casals, aseguró que, aunque por el momento no se ha cuantificado el número de anulaciones, son "muchísimas" debido a que "se ha paralizado todo otra vez". En definitiva, se ha cancelado prácticamente todo lo que se había reservado tras el fin del Estado de Alarma y la reapertura al turismo internacional. Entonces, cerca del 25% de los hoteleros de Barcelona decidieron abrir sus puertas, pese a los bajos niveles de ocupación.
Ante esta 'nueva fase' de la pandemia, Casals señaló que ha echado en falta más planificación por parte de la administración, ya que considera que se está trabajando "un poco según lo que está sucediendo día a día, sin tener una hoja de ruta clara". Al mismo tiempo, puso de relieve que el gobierno catalán debe tomar medidas "proporcionadas" y comunicar mejor la situación de la comunidad. "Al final no estábamos diciendo que Barcelona está cerrada, ni que Barcelona no se puede visitar, pero a nivel internacional depende del tipo de mensaje que envías lo que provoca es una parada contundente y clara, porque el mensaje que llega es que es peligroso visitar Barcelona", especificó.
Como consecuencia de esta situación, los hoteleros han solicitado a las administraciones la prolongación de los ERTE (Expediente de Regulación Temporal de Empleo) hasta finales de año, así como que se condone o aplace el pago de impuestos. También, han pedido un plan de rescate para el sector turístico hotelero, similar al que se desarrolló para la banca en la crisis de 2008, debido a la importancia de esta actividad para la economía del país, con una aportación de 12,6% al PIB y superior al 14% al empleo. Por último, auguró que "un segundo confinamiento sería un desastre a nivel turístico, económico e, incluso, psicológico para los ciudadanos".
La situación de la C. Valenciana
Por su parte, el secretario de Turismo de la Generalitat Valenciana, Francesc Colomer, señaló que la decisión de Reino Unido de imponer la cuarentena a toda España supone "un contratiempo más" y lamentó que se haya decretado cuando el sector "estaba empezando a notar un relativo dinamismo". Por otro lado, enfatizó que Reino Unido es un mercado fundamental para la Comunidad Valenciana y que "ningún otro destino presenta medidas de seguridad mejores".