Los conductores con licencias VTC, utilizadas por compañías como Uber o Cabify, han denunciado ante la Jefatura Superior de Policía de Madrid las continuas agresiones sufridas entre junio de 2014 y diciembre de 2016. Estos profesionales aseguran que existe “una campaña de acoso” con episodios de “daños y agresiones a los conductores” incluso con pistolas de perdigones y ácido.
La asociación Unauto, que engloba a 120 empresas y más de 1.300 conductores de transporte privado, acusa a Élite Taxi en Madrid, Valencia y Barcelona de estos incidentes.
Eduardo Martín, director de relaciones institucionales de la organización, ha declarado que se ha denunciado porque se han vivido varios "hechos similares que siguen un patrón y que tienen una correspondencia con las redes sociales, donde se suben vídeos y fotos y se hacen llamadas al odio, a las agresiones e incluso a la compra de martillos".
Según fuentes consultadas por El Confidencial, los episodios han empeorado en los últimos meses y no descartan que esto esté provocado por el malestar en torno a las 3.000 licencias que el Tribunal Supremo podría autorizar en 2017.
Por su parte, los taxistas de Madrid y Barcelona han convocado un paro para el 16 de marzo en contra de la actividad de los coches con licencia VTC.
