La crisis del coronavirus ha terminado por asfixiar a Aena. Según ha informado El Confidencial, el operador aeroportuario ha solicitado un crédito urgente de 1.000 millones de euros y está negociando otro, de forma paralela, de la misma cantidad.
Hasta hace escasos días, la compañía tenía en mente seguir pagando un dividendo millonario a sus accionistas, entre los que figura el Estado con el 51% del capital, pero ahora ha enviado una señal de socorro a sus acreedores con el objetivo de sobrevivir a esta situación.
Y es que la pandemia ha obligado a reducir, prácticamente al mínimo, el tráfico áereo, así como ha paralizado casi la totalidad del negocio comercial en su red de aeropuertos española (46 aeródromos y dos helipuertos).
De acuerdo con el operador, el tráfico de pasajeros en las terminales españolas acumula una caída del 45,5% en lo que va de marzo, con respecto al mismo período de 2019. Esta precipitación fue del 97% tan solo el pasado martes, 24 de marzo.
Ante este esecenario, la compañía ha activado una serie de medidas para preservar su liquidez, entre las que se encuentra la suspensión temporal de su programa de inversiones, lo que implica el ahorro de unos 52 millones de euros mensuales. Pese a ello, el diario citado señala que está en conversaciones con diferentes bancos, tanto nacionales como extranjeros, para conseguir un crédito urgente de 1.000 millones.
