El pasado lunes se inició en Palma (Mallorca) el juicio por una supuesta estafa, de casi un millón y medio de euros, efectuada por una escuela de pilotos de la ciudad.

Según ha informado Diario de Mallorca, en la causa existen una treintena de alumnos perjudicados que pagaron entre 30.000 y 50.000 euros por recibir formación en los años 2006 y 2007. Finalmente, la academia cerró sus puertas a finales de 2007 por problemas económicos, por lo que los afectados no pudieron completar el curso y perdieron su dinero.  

Dicha escuela de pilotos fue vendida a unos empresarios de Granada en 2006. El contrato incluía una cláusula de compraventa para asegurar la continuidad de la formación de los alumnos que ya recibían clases. Incluso, los vendedores abonaron más de medio millón de euros para garantizar los gastos derivados de esta formación. 

Según la fiscalía, los cinco acusados, y entonces nuevos responsables del centro, publicitaron la escuela para captar a nuevos alumnos. De hecho, dos de los investigados formalizaron 13 contratos nuevos, por los que percibieron unos ingresos de 233.745 euros. 

Mientras, dos de los acusados defienden que la actividad del centro concluyó a mediados de 2008 y no en 2017, así como que muchos de los alumnos que reclaman pertenecen a ediciones anteriores. La fiscalía, por su parte, solicita seis años de prisión y 12 meses de multa con el pago de 25 euros diarios por un delito continuado de estafa. 

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