El Gobierno Central y Baleares ya tienen "un documento prácticamente cerrado" para ejecutar el traspaso de las competencias en materia de Costas, hasta ahora estatales, a la Comunidad Autónoma balear. Este cambio administrativo se hará antes de acabar el año, según ha informado este miércoles la consellera de Presidencia, Función Pública e Igualdad, Mercedes Garrido, durante un pleno del Parlament.
Las declaraciones se han producido como respuesta a una pregunta emitida por el diputado Juan Manuel Lafuente (PP) en la sesión de control al Govern, contestando Garrido además que el procedimiento para la transferencia "continúa con el calendario previsto".
Por su parte, Lafuente ha mostrado su preocupación porque el nuevo reglamento siga perpetuando una toma de decisiones "arbitraria y discrecional", argumentando que el actual Ejecutivo balear podría ejecutar el reglamento de forma interesada. "Alarma ver la posición del Govern o representantes de los partidos que gobiernan, que según dónde se aplica el reglamento es discutible; si es en cuanto al chiringuito de Deià están en contra, pero si es el Bungalow de Palma, ahí se callan y no dicen nada", dijo el responsable político.
Chiringuito 'El Bungalow' de Palma (Mallorca)
Informa el medio insular Diario de Mallorca que Garrido ha concluido su intervención afirmando que la cesión de responsabilidades se hará en los términos que marca el 'Estatut d'Autonomia' y que hasta que no finalicen las negociaciones no podrá ofrecer más detalles.
Costas, protagonista en la actividad turística balear
En 2022, Costas ha intervenido varias veces para finalizar con la actividad de diversos chiringuitos y establecimientos baleares cercanos a la playa. Así, los restaurantes El Bungalow y El Peñon 1957, situados a pocos metros del mar en la playa de Ciudad Jardín de Palma (Mallorca), serán derruidos por la corta distancia del edificio respecto al mar, y el Chiringuito Can Lluc de Deià (Mallorca) no será renovado, también por motivos medioambientales.
Ahora Baleares dispondrá de plenas competencias en lo que se refiere a construcción, asignación de playas, autorizaciones de ocupación del espacio marítimo-terrestre, permisos de actividades de riesgo o de licitación para la concesión de servicios, todos ellos aspectos de suma importancia para la gestión y el desarrollo turístico de la región.
Tras años de declaraciones del sector turístico que acusaban la ineficiencia de la gestión estatal en materia de Costas, ahora será el ejecutivo regional el que lidie con las demandas de ambientalistas, hoteleros, ciudadanos o partidos políticos.
