A base de ‘camas calientes’. Así pretenden algunas personas acabar con el problema de vivienda que se da en Ibiza al inicio de cada temporada turística. Todos los años, a las puertas del verano, numerosos trabajadores se dirigen a la isla a ‘hacer la temporada’ y arranca la locura de los alquileres, con habitaciones —no viviendas— que alcanzan los 1.100 euros al mes, pero este año se ha ido un paso más allá, con el arrendamiento de camas por turnos.
“Cuando ya no hay oferta, se rompen todos los límites e Ibiza es un caos. Hay habitaciones por 800 euros, pero ya se está llegando al extremo de alquilar turnos de habitaciones, de mañana y de noche, como si fuesen camas calientes”, explica José Miguel Artieda, presidente del Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Baleares.
Artieda indica que el mayor problema se da en plena temporada turística, “que no afloja”. Sin embargo, el éxito turístico tiene una contraprestación: “Hay que dar más servicios y eso requiere mano de obra con techo. Y no lo hay. Todas las viviendas están ocupadas”, advierte en declaraciones a Última Hora.
Asimismo, Artieda avisa de que lo que pasa en Ibiza se acaba replicando unos dos años más tarde en Mallorca. De hecho, en la mayor de las Baleares, ya comienzan también a darse problemas de vivienda, con alquileres de habitaciones que también rondan los 1.100 euros en algunas zonas de Palma. “Hay que frenarlo, tenemos que actuar”, advierte Artieda.