Los vecinos de Puerto Marina (Benalmádena, Málaga) han denunciado los ruidos que generan varios locales de ocio de la zona, impidiéndoles dormir, así como han exigido al Ayuntamiento de Benalmádena el aumento del control policial. De no ser así, han amenazado con llevar el asunto a los tribunales.
Según ha informado Sur, uno de los vecinos afectados ha recriminado que existen locales que no cumplen con los horarios, mientras que otros "ni siquiera tienen permiso". "Llamamos a la Policía Local y apagan la música, pero luego vuelven a conectarla", añadió. La situación, de hecho, ha empeorado en verano, ya que el recinto portuario se convierte en la única opción de ocio para los turistas.
Otra vecina perjudicada por los ruidos ha recalcado la imposibilidad de conciliar el sueño, algo que afecta a la salud de los vecinos. Los residentes, incluso, han realizado mediciones acústicas para presentarlas como prueba en el caso de que denuncien la situación ante el juzgado.
Desde el Ayuntamiento han aclarado que este tipo de quejas se remontan a 1996, ya que ha sido prácticamente imposible lograr el equilibrio entre "el ocio nocturno propio de una localidad turística y el derecho al descanso de los vecinos". También, aseguraron que en verano una patrulla de la Policía Local trabaja de forma permanente en el puerto, así como que las denuncias vecinales han sido atendidas por los agentes "a través de apercibimientos y multas".