Durante los últimos años los precios de entrada a los museos de España no han parado de crecer y con esto, ha descendido el público español en los mismos. 

En la edición del año pasado del informe ‘Conociendo a todos los públicos. Un análisis de la visita al museo en familia', realizada por el equipo del Laboratorio Permanente de Público de Museo del Ministerio de Educación, Cultura y Deportes se determina que algunos segmentos del público, como los jóvenes e inmigrantes, no cuentan con una representación proporcional en los museos.

Además, un segmento como es el familiar tampoco cuenta con la representación esperada y ya no acude a los museos con la afluencia que estas instalaciones desean. 

Si en 2003 el Estado financiaba el 85,7% del presupuesto del Museo del Prado,en la actualidad, el centro aporta con sus fondos propios el 73% mientras que el Estado ayuda con 13,7 millones de euros. El recorte está obligando a subir los precios, perjudicando de esta manera al público nacional: En 2011 pasó de 7 a 12 euros. En 2013 de 12 a 14 euros y antes de la inauguración de la exposición del Bosco se subió a 15 euros. 

En 2016 los usuarios de la pinacoteca fueron en un 59% extranjeros y 41% residentes en España. Los más interesados en la galería son los madrileños y los estadounidenses. Sin embargo, mientras el salario medio de un español es de 16.000 euros anuales, el de un residente en el país norteamericano es de casi 50.000, y ambos pagan lo mismo. 

Asimismo, el 48,8% de los visitantes lo hacen sin pagar, pues cada semana el recinto abre durante 14 horas de manera gratuita, pero solo para la colección permanente. El 53% de las personas que acceden al museo de esta forma son españolas. 

El perfil de usuarios se repite en los museos Reina Sofía y Thyssen-Bornemisza. Según un informe de la empresa Asimétrica, los internacionales suponen un 59% de las entradas vendidas. Por su parte, en el segundo los visitantes internacionales suponen el 57%. El director gerente del museo, Evelio Acevedo, defiende que se reciban más ayudas del Estado y se ofrezcan menos horas de gratuidad: "El museo del siglo XXI no se distingue por su gratuidad, sino por ser accesible al mayor número de públicos”, apunta. Además, apuesta por la divulgación del museo en la web para llegar a más público.

Según el informe del Laboratorio Permanente, los visitantes apuntan que los dos aspectos que de mejorar favorecerían su visita a los museos serían el precio (34,4%) y los horarios (25,3%). “El público familiar es un segmento muy sensible a los descuentos y días gratuitos”, señalan.